3/12/08

"Te acordás hermano" - L´Inici

En aquell any de 1998, Silvia i jo varem tenir la sort d´entrar en el tango de la ma del professor Carlos Daurat, un porteño arrelat a Barcelona.

I dic sort perquè el més important d'un aficionat al tango es el seu inici, la pròpia imatge, sentirse "guapo", en poques paraules començar a ballar un tango enamorats i enamorant a qui ens observa, aconseguir que en els primers segons tant la teva parella com un mateix mantinguin un estil elegant, ben plantat, amb una gran presència. Només la primera estampa de la parella en iniciar el ball ha de dir que ens espera una cosa que no ens podem perdre.

Per en Carlos era el més important. Sempre ens deia: "En la pista no hagáis ruido, salid a bailar caminando, sin prisa, un tango ha de ser austero, y de vez en cuando una figurita, pocas, y no exageréis con los adornos ". No es cansaba de repetir: "Antes de comenzar a bailar escuchad la música y solo después iniciad el movimiento, si no comprendéis un tango no podéis vivirlo, ningún tango es igual a otro".
Només cal veure la posició d'una abraçada amb Silvia a la foto, en les primeres classes ja t´indicava aquesta elegància que hem intentat mantenir. Era un home que havia ballat tango tota la seva vida i que a Barcelona ensenyava al soterrani del Teatre Goya. Al baixar les escales se sentía el tango "Charlemos" interpretat pel mestre Osvaldo Manzi.

Carlos Daurat ja no es amb nosaltres y mai sabrem perquè sempre ens rebía amb aquella cançó, però si guardarem d´ell un gran record, ja que va saber transmetre els seus sentiments a una parella que començaba.

En aquel año de 1998, Silvia y yo tuvimos la suerte de entrar en el tango de la mano del profesor Carlos Daurad, un porteño arraigado en Barcelona. Y digo suerte porque lo más importante de un aficionado al tango es su inicio, la propia imagen, sentirse "guapo", en pocas palabras empezar a bailar un tango enamorados y enamorado a quien nos observa, conseguir que en los primeros segundos tanto tu pareja como uno mismo mantengan un estilo elegante, bien plantado, con una gran presencia. Sólo la primera estampa de la pareja al iniciar el baile tiene que decir que nos espera algo que no nos podemos perder.
Para Carlos era lo más importante. Siempre nos decía: "En la pista no hagáis ruido, salid a bailar caminando, sin prisa, un tango debe ser austero, y de vez en cuando una figurita, pocas, y no exageréis con los adornos". No se cansaba de repetir: "Antes de comenzar a bailar escuchad la música y solo después iniciad el movimiento, si no comprendéis un tango no podéis vivirlo, ningún tango es igual a otro". Sólo hay que ver la posición de un abrazo con Silvia en la foto, en las primeras clases ya indicaba esa elegancia que hemos intentado mantener.
Era un hombre que había bailado tango toda su vida y que en Barcelona enseñaba en el sótano del Teatro Goya. Al bajar las escaleras se escuchaba el tango "Charlemos" interpretado por el maestro Osvaldo Manzi. Carlos Daurad ya no está entre nosotros y nunca sabremos porque siempre nos recibía con esta canción, pero si guardaremos de él un gran recuerdo, ya que supo transmitir sus sentimientos a una pareja que comenzaba.

1 comentari:

Consuelo García del Cid Guerra ha dit...

Buscaba informacion sobre Carlos y me encuentro con vuestro blog...os recuerdo perfectamente del teatro Goya. Fui muy amiga de Carlos. El ponia ese tango, "charlemos", porque era como el corto anticipado de los cines, para relajar y entrar en materia. Es muy hermoso el recuerdo que aqui mostrais sobre Carlos Daurat.Murio tranquilo, pero demasiado pronto. Era un gran tipo y lo llevo en el corazon. Un abrazo
Consuelo Garcia del Cid Guerra
consuelogdelcid.blogia.com
www.nosquedalapalabra.com